Tanto si te quedas en casa como si tomas un corto descanso de fin de semana, es esencial que no te pierdas nuestros consejos para cuidar tu piel cuando pases el verano en la ciudad.
Adoptar una rutina de cuidado de verano en la ciudad
Así como el clima cambia durante todo el año, también lo hace tu piel. Si todas utilizáramos la misma rutina, sería probable que no nos funcione por igual, sobre todo en verano cuando las pieles grasas o con imperfecciones tienden a irritarse con más facilidad. El clima cálido provoca un aumento en la transpiración, haciendo más probable que la piel sea propensa a manchas. Por eso es fundamental hacer una limpieza correcta para que los poros no estén obstruidos. Los limpiadores espumantes que incluyen astringentes, como el ácido salicílico, son ideales para eliminar el exceso de aceite, mientras que un humectante ligero a base de gel ayuda a no sobrecargar la piel.
En cuanto a la piel seca, la hidratación se vuelve aún más importante durante los meses más cálidos. La exposición excesiva a los rayos del sol puede causar una pérdida de agua mayor debido al aumento de la temperatura, lo que resulta en una barrera de la piel cada vez más débil en sus funciones: como sabemos, sólo 20 minutos al sol pueden dar lugar a que la piel pierda hasta el 25% de su hidratación. Asegúrate de hidratar el rostro y el cuerpo con regularidad para detener los efectos de secado del sol.
Viajar mientras cuidas tu piel
Cuando se trata de actualizar la rutina de cuidado de la piel es importante tener en cuenta el efecto que contaminación puede tener en la piel. Ya sea en aviones, trenes o automóviles, la gente tiende a moverse mucho más cuando hace calor, lo que significa que la contaminación tiende a ser más alta -y permanecer durante más tiempo-. Descubrir una nueva ciudad siempre es divertido, pero si planeas pasar mucho tiempo en el transporte público, recuerda que los rayos UV pueden penetrar a través de las ventanas y reflejarse en tu piel, incluso en días nublados.
De hecho, el estrés oxidativo comienza a acumularse y dañar la piel cuando la contaminación se combina con los rayos UV, un fenómeno conocido como foto-contaminación. Los productos de cuidado de la piel que combinan SPF con una alta protección UVA e ingredientes ricos en antioxidantes, como los productos de la gama Idéal Soleil, pueden ayudar a combatir el daño de los radicales libres causado por un mayor daño de exposición.
Si piensas que un rato largo en el océano es la única manera que tu protector del sol se salga, estás equivocada. Además de sudar más, el roce constante de la piel entre sí o con la ropa, nos juega más desprotegidas. Puede parecer obvio, pero las fibras naturales como el algodón y el lino, son mucho mejores cuando se trata de absorber el sudor y recuerda reforzar el bloqueador cada dos horas, aunque no te hayas bañado en el mar.