¿Una mascarilla? Por supuesto, pero ¿cuándo y cómo? Dos preguntas fundamentales para optimizar la eficacia de tu mascarilla para la cara. Los métodos de aplicación sugeridos por nuestros expertos.
El lugar correcto, en el momento correcto
¿Cuándo hay tiempo para aplicar una mascarilla? ¡Todo el tiempo! Cualquier momento durante el día –basta con diez minutos libres– es una oportunidad para disfrutar de una pausa para una misma, ya sea por la noche después del trabajo, antes de una cena o, incluso, mientras pasamos la aspiradora (esto para aquellas aficionadas a la multitarea). Esos diez minutos, aunque puedan llegar a ser agradables relajándose en el baño con una mascarilla facial, no tienen por qué ser desaprovechados sin hacer nada. Usa ese tiempo para ponerte al día con amigos o familiares al teléfono, empezar la cena o hacerte una manicura o pedicura. El número de veces al mes que deberás usar una mascarilla dependerá de tus necesidades para el cuidado de la piel y la mascarilla en sí. Se recomienda el uso de la Mascarilla Purificante y la Mascarilla Doble Resplandor de Vichy una o dos veces por semana, dejando que ésta actúe durante 5 minutos antes de enjuagar. La Mascarilla Refrescante se puede aplicar hasta tres veces por semana: solo hay que dejarla puesta durante 5 minutos, y luego limpiar el exceso con un algodón.
Aplicación correcta y consejos
Para sacar el máximo provecho de tu mascarilla, es fundamental aplicarla correctamente. Puede que ya sepas –aunque es fácil de olvidar– que una mascarilla siempre se debe aplicar sobre la piel limpia. Además, recordá ponerla en el cuello y el escote, que pueden sufrir de líneas finas y sequedad si no se cuidan regularmente.
Mascarilla Refrescante: aplicar una cantidad media de la mascarilla sobre la piel con tus dedos, seguido por suaves golpecitos hacia adelante y atrás sobre la frente, las mejillas y la barbilla para maximizar su absorción. Qué dicen nuestros expertos: no olvidar la zona de los ojos. Aplicar el bálsamo de ojos Aqualia Thermal en una capa delgada alrededor del contorno de los ojos antes de ponerles la Mascarilla Refrescante al resto de la cara, cuello y escote. ¡Lo ideal es rociarte ligeramente con un poco de Agua Termal Mineralizante de Vichy para intensificar la sensación de frescor y dotar la piel de más minerales!
Con la Mascarilla Doble Resplandor: usar el dedo índice para untar la mascarilla mediante pequeños movimientos circulares para lograr una exfoliación suave. Los primeros 4 minutos se concentran en generar un peeling de ácidos Alpha-Hidroxy, mientras que durante el último minuto disfrutarás de la exfoliación de roca volcánica. Qué dicen nuestros expertos: para intensificar la exfoliación, rociar un poco de Agua Termal Mineralizante sobre la cara antes de iniciar los movimientos circulares con el dedo.
La Mascarilla Purificante debe ser aplicada usando la yema de los dedos, presionando suavemente hacia abajo desde el centro de la cara hacia el exterior para promover la penetración, y centrándose especialmente en la zona T, que suele ser la parte más congestionada de la cara. Qué dicen nuestros expertos: nunca dejar que las mascarillas de arcilla se sequen por completo sobre la piel. Puede que disfrutes ver como la mascarilla se desmorona, pero esto solo significa que la piel debajo de la mascarilla se ha secado también. ¡5 minutos es suficiente para que tu mascarilla haga su magia! Antes de aplicar la mascarilla de arcilla, usar una toalla caliente para cubrir la piel durante algunos segundos. Después de enjuagar la mascarilla de arcilla, finalizar el ritual de belleza untando el Gel Fresco Limpiador Pureté Thermale con un disco de algodón. No solo limpia el residuo de la mascarilla de arcilla, sino también tonifica la piel y reduce los poros.