Si la practicamos regularmente, la marcha rápida resulta más eficaz que el footing. ¿Cierto o falso? He aquí nuestros consejos para caminar más tiempo, más rápido y perder 1 o 2 kilos en el camino.
Ya todas conocemos los grandes beneficios de un largo paseo dominical, después de una comida con muchas calorías o una semana demasiado cargada. Un verdadero soplo de aire fresco y caminar algunos kilómetros aligera cuerpo y alma. Es un deporte fácil y nos ayudará a perder uno o dos kilos rápidamente.
La marcha rápida, un deporte simple con grandes beneficios para el cuerpo
Para Valérie Orsoni, coach de fitness*, la marcha rápida es el deporte que lo tiene todo:
- Caminar rápidamente aumenta la capacidad respiratoria y el ritmo cardíaco. Es ante todo un deporte que nos mantiene en forma.
- La marcha rápida tonifica los músculos del cuerpo sin agredirlos. Una buena noticia para las que tienen articulaciones sensibles. Trabaja: pantorrillas, muslos, glúteos, abdominales, brazos.
- La marcha rápida afina también la silueta. La celulitis y las redondeces se ven en aprietos, porque caminar drena las toxinas y permite gastar en promedio 400 calorías en 1 hora (versus 380 en el caso de hacer footing, para lo que hay que correr una hora).
- Finalmente, la marcha rápida nos mejora el estado de ánimo. Si la practicamos al aire libre, reduce considerablemente el estrés y nos oxigena.
¿Cómo se debe practicar la marcha rápida para adelgazar?
No hace falta mucho equipamiento, basta con una botella de agua y un par de zapatillas (una baja inversión). Y así, nos lanzamos a una marcha rápida de 45 minutos a 1 hora. El ritmo ideal sería de 5 o 6 km/h. Para cronometrarnos, podemos recurrir a uno de esos lúdicos brazaletes o a al reloj de nuestro telefono inteligente.
Si queremos adelgazar y perder algunos kilos durante la caminata, debemos encarar esta actividad como un paseo dinámico, “los brazos y los hombros deben estar relajados y la panza adentro para trabajar los abdominales. Luego, para trabajar las piernas y eliminar un número mayor de calorías, optemos por un terreno irregular” aconseja Valérie Orsoni.
Caminar para adelgazar: ¿a qué ritmo?
En cuanto al ritmo, lo ideal es caminar todos los días durante 30 minutos, es en todo caso la recomendación del Programa Nacional de Nutrición y Salud de Francia. Sin embargo no nos sintamos culpables si no tenemos tiempo para cumplir con este programa: 1 a 2 veces por semana está muy bien para empezar. Pero no dudemos en caminar cada vez que se presente la ocasión. Toda excusa es buena para mejorar nuestra silueta: subamos por escalera en lugar de usar el ascensor, bajemos una parada antes de los medios de transporte público, caminemos con buen ritmo cuando vamos a buscar a los niños al colegio o mientras hablamos por teléfono, por ejemplo.
Caminar, adelgazar y seguir motivadas
Para no perder la motivación, fijemos objetivos en función de la distancia y no tanto de un tiempo dado. Por ejemplo, caminemos hasta ese negocio ubicado a 4 km atravesando el parque. Nos veremos obligadas a regresar caminando y así será más fácil alcanzar el objetivo.