Si bien el nombre no es atractivo, realmente tienes que prestar atención cuando hablamos de alimentos fermentados si estás buscando mejorar tu salud en general. En esta nota te contamos por qué debes incorporarlos a tu dieta hoy mismo. ¡No te lo pierdas!
Primero lo primero, ¿qué son los alimentos fermentados?
Lo primero que tenemos que aclarar es que esto no es tan aterrador como suena. A pesar de su alta popularidad de los últimos tiempos, los alimentos fermentados se han utilizado - y consumido - en las cocinas de todo el mundo para fomentar el desarrollo de nutrientes esenciales y buenas bacterias, durante miles de años.
Hoy, los estos alimentos marcan una tendencia foodie en todos los platos. Su sabor puede variar de amargo a ácido, pero lo que no varía en ningún caso son beneficios potenciales para la salud, desde pérdida de peso hasta una mejor calidad de la piel.
¿Cómo se fermentan los alimentos y cuáles son sus beneficios?
Tal vez no estés familiarizada con la palabra "fermentado" - al menos cuando se trata de una vida saludable - pero ¿qué pasa con probióticos? El proceso de fermentación produce una aceleración en el crecimiento de nutrientes probióticos esenciales, el yogur posiblemente sea el ejemplo más conocido. El resultado - un aumento en el nivel de bacterias buenas en el tracto digestivo - no sólo puede mejorar el proceso digestivo en sí, sino también ayudar a reforzar tu sistema inmunológico. ¡Y todo esto sin suplementos extras a la vista!
¿Qué alimentos fermentados debes agregar a tu dieta?
Entonces, ¿qué tienen en común los distintos productos fermentados? La introducción de un cultivo que alienta lentamente el crecimiento de estas buenas bacterias, convirtiendo los carbohidratos y azúcares naturales del producto en vitaminas y minerales esenciales. Los nutrientes resultantes son 'potenciados', lo que significa que las vitaminas naturales y minerales ya presentes se vuelven aún más eficaces.
El kimchi, por ejemplo, es una preparación coreana a base de vegetales sazonados en los que los niveles de vitamina C de la col se disparan y ayudan a lucir una piel perfecta gracias al aumento de la producción de colágeno. En cambio el tempeh, hecho de soja fermentada, es una excelente fuente de proteínas, que también es responsable de estimular la producción de colágeno. Reemplazar la carne o pescado con tempeh es una gran manera de incorporar estos dos productos en su dieta.
¿De postre? El kéfir de Europa Oriental - una bebida espesa y ácida similar al yogur - es una gran fuente de vitamina D, que estimula el crecimiento de cabello, piel y uñas. ¿Ya tienes ganas de probar? Ve a la cocina y hazlo hoy mismo.